Vistas de página en total

martes, 8 de mayo de 2018

¿QUIERES VERLO?



Mientras grita y se estremece de puro gozo, el italianito caliente se felicita una vez más. Sólo tiene que sonreír en la piscina, con su hilo dental, y ofrecerse a mostrarle la línea del bronceado a algún chico guapo y lleno de testosteronas, para que este, en cuanto la vea, aunque dijera que eso no le gustaba ni atraía, aunque le intrigaba, se entregara a darle con todo. Del resto se encargaba él, con haladas y apretada, para que entendiera que era bueno, a veces, tener a manos un apretado trasero.

No hay comentarios:

Publicar un comentario